Inicio Contáctenos Presupuesto







WEB EN INGLES

E-mail de contacto:

administracion@olife.es

 

>> RECOLECCIÓN
>> ELABORACIÓN
>> ALMACENAMIENTO
>> ENVASADO
Fabricación  >  Recolección

Para obtener un aceite de calidad, es fundamental recolectar la aceituna en su momento óptimo de maduración. Cuando el fruto del olivo aumenta de tamaño y empieza a adquirir tonalidades características que definen cada variedad, este será el momento adecuado para su recolección.

Entre los factores que definirán el periodo óptimo de recolección se encuentran la resistencia a la tracción del pedúnculo de la aceituna, contenido de aceite del fruto, la calidad del aceite y fecha de recogida anteriores.

Recogida
La recogida del fruto se realiza en su mayoría manualmente, aunque se están introduciendo nuevas tecnologías para facilitar la recolección del fruto, estos sistemas no están muy extendidos en el sector. Hay que destacar tres métodos de recogida tradicional:

Recogida del suelo

Se aprovecha la caída natural del fruto maduro, recogiéndose del suelo en una o varias pasadas. Es empleado en condiciones donde el árbol es de gran tamaño y zonas en las que el terreno es de difícil acceso. Pero es evidente que su gran inconveniente repercute en la calidad del aceite, obteniéndose rendimientos bajos y elevando el coste de la mano de obra.

Ordeño

Es por excelencia el método mas utilizado en la recolección de la aceituna de mesa. El jornalero encaramado en escaleras o desde el suelo recoge las aceitunas a mano y las deposita en recipientes colgados en su pecho. Cuando se trata de aceitunas de aceite, el procedimientos es menos esmerado, el operario en este caso desliza la mano entreabierta por cada ramo cargado de frutos, dejándolo caer en lienzos depositados bajo el árbol.

Vareo

Método mas extendido en el campo, el operario golpea los ramones del árbol con una vara de tres a cuatro metros de longitud de forma lateral, siendo esta la mejor manera para no dañar el árbol. El fruto es recogido de los lienzos o mallas, extendidos por la superficie de proyección mayor a la del árbol. Estas se pliegan y vierten el fruto en espuertas o sacos.
Es el derribo de los frutos el procedimiento donde mayor auge de mecanización se ha obtenido y donde más atención se ha prestado para agilizar y hacer cómoda la labor del operario. Es por ello la insistencia de los técnicos en lograr maquinas que cubran las necesidades de estas operaciones preliminares.